sábado, 22 de octubre de 2011

Mitzi Sandoval - Poemas de Sol y Mar

Del interior vinieron nuestros padres, a esta ciudad
canalera. Aquí nacimos, pero con el alma y el
corazón, repletos de salomas, tamboritos y tunas
callejeras.
Y fueron aquellos, los cuentos de la tradición oral, del
tío Conejo y tío Tigre, de la tía Noneca y la tía Zorra,
del Padre sin Cabeza, de la Pavita de Tierra, de la
Tulivieja, del tío Capacho, la Silampa y la Llorona, y
otros, que se me escapan de la memoria, narrados
por las muy queridas abuelas o tíos Cuenta Cuentos,
en aquellas nochecitas veraniegas, debajo de la
tenue luz de un farol, los que nos marcaron, desde
un inicio, y para siempre, el gusto por escribir y narrar
cuentos para los niños y niñas.

Jugando en el mar

Yo juego cantando
yo canto al jugar
los juegos marinos
mis días en el mar.
Y juego en la arena
y al viento sin par,
Y juego en las aguas
que saben a sal.
Jugar con los peces,
me gusta el coral,
jugar con la brisa
que viene y se va.
Y juego en la lluvia
que juega en el mar
gotitas de nube
que el sol secará.

Mi Barco Velero
¡Anda
barquito, mi amigo
que el agua quieta
ya no lo está.
Tu proa embiste,
mi barco velero
cortando, alerta,
el azul del mar.
¡Hala!
barquito, ¡navega!
¡allí donde el mar
al cielo se unió!
¡Resiste! ¡Aguanta!
¡Hincha tus alas...!
¡la furia del viento,
se desató!
Anda, barquito
mi amigo,
juntos, yo quiero viajar,
ver otros mundos,
ver otros mares,
contigo, siempre, ¡soñar…!
¿Por qué duerme el candil?

El candil cierra los ojos
Y duerme en el alba.
Le gusta la noche
porque en ella vibra,
y su sombra gira,
y se agita,
y se estira,
y es inmensa…
Por eso el candil
cierra los ojos
y duerme en el alba.